segunda-feira, 12 de maio de 2008

La ratita presumida la llamaban...


Hoy quiero contar un cuento pero no recuerdo ninguno de mi infancia excepto EL DE LA BUENA PIPA, por lo que tendre que inventarme algo, pero para ello me basaré en alguna historia real de esas que acontecen algunas veces y siempre las recuerdas con una cerveza en la mano. He decido titularlo la ratita presumida II.


La ratita presumida de mi cuento no es una ratita cualquiera,es presumida por supuesto y quien no.Le gusta comprarse ropa pero de un tiempo a esta parte no tiene muchas tiendas donde escojer, es una de las desventajas de vivir en una isla.

La ratita de mi cuento es una luchadora pero no solo de boca para afuera,lleva tiempo luchando para encontrar esas pequeñas cosas que hacen felices a todos los ratones, en su nevera nunca falta queso y en sus estanterias libros de Frida y cientos de textos y relatorios escritos siempre desde una perspectiva de genero, lleva en la sangre eso del feminismo.A veces cuando tiene algun encuentro con otras ratitas y ratoncitos lo pasa mal, por que ellos son tan machistas...que no puede contener su rabia y sin quererlo explota y deja salir por su pequeña boca toda su sabiduria y su ideologia, es joven aún esta ratita.

Ella vive en una pequeña ratonera con su ratoncito preferido un macho encantador.Su ratonera es pequeña pero acojedora,tan apañada. Siempre hace mucho calor dentro por que la ratita es muy friolera,ademas su morada tiene mucha humedad por lo que acostumbra a tener el radiador encendido. La ratita y su namorado son muy felices en su ratonera, les encanta cocinar para sus amig@s.

Pero como todo buen cuento tiene una parte mala.A veces los ratones tienen miedos, fobias...y el suyo son los humanos. No puede ni verlos,cada vez que escucha un ruido raro en la casa piensa que algun humano esta entre sus ropas o debajo de algun mueble.Ha tenido mucha suerte por que desde que ella y su namorado llegaron a la nueva ratonera solo una vez tuvieron que matar a uno....pero los humanos aún no son una especie en extinción y una tarde de mayo los ruidos comenzaron de nuevo, ella estaba sola en la ratonera y enseguida se vio invadida por el pánico,sin saber que hacer ni como actuar,no dudó ni un segundo en llamar a una vecina cercana.

"SOS dijo ella, un humano se ha metido en mi ratonera", no puede ser le dice su vecina no es la época de los humanos. La vecina sin pensarlo dos veces cogio la escoba y todo lo rapido que sus patitas podian llego hasta la ratonera de nuestra querida ratita.Alli estaba ella,tan asustada, no tardaron mucho en ponerse manos a la obra para encontrar al pequeño ser humano que tuvo el valor de meterse en hogar: Movieron libros,cajas,estanterias y el dichoso humano no aparecia,quizas sabia lo que le esperaba.

DEpues de mucho esperar ,buscar y golpear el suelo para asustarle no habia humano ninguno en la casa,quizás tenia una guarida secreta tras la pared del televisor pensó la vecina.Cuando ya todas las hipotesis estaban a punto de ser corroboradas, algo extraño comenzo a suceder , la luz se iba y se venia y el enchufe hacia un rudio estraño similar al de los humanos; ambas no podía creer lo que estaba ocurriendo , el humano se habia transformado en enchufe y este a su vez en rabia y la rabia en chispas y las chispas en apagones.

El tema estaba resuelto y nuestra ratita nunca olvidará esa historia, a partir de entonces siempre se pone tapones en los oidos para no escuchar ruidos extraños y de un tiempo a esta parte esta pensando en mudarse de ratonera, quizás a una sin piscina pero seguro que tambien sin humanos mal educados que entran en las ratoneras sin pedir permiso pensando que pueden hacer en esta vida lo que les plazca.


Moraleja: al gusto del consumidor.

Um comentário:

natalia disse...

Me encanta!!!nunca habia escrito un cuento sobre mi!!! mi ego ratonero esta por las nubes!!por cierto?tu que eres?ratona,perrilla, humana?jejej
Muchas gracias guapa.
bjsss