A decir verdad y extraño en mi los nervios no se apoderaron de mi hasta el ultimo momento.
El trabajo estaba casi todo hecho,solo algunos retoques de ultima hora,cambiar alguna diapositiva del Power point,cambiar algun error en el texto....Por lo demás todo paracia ir sobre la seda,hasta llegar a la sala donde se realizo este encuentro
. El ordenador no reconocia el proyector,despues de maquinar, encender ,apagar...parece que por fin lo reconocio,claro que un problema casi siempre viene seguido de otro. Esta vez el problema fue peor,mi presentación no abria,solo la primera diapositiva.....pufff entonces si que empezaron los nervios,fue entonces cuando decidi dejar en manos de otras personas para ir a la soledad de la playa a ensayar mi discurso.
Ridiculo, una mujer hablando sola con unas hojas en la mano, intentando pronunciar de manera adecuada cada una de las palabras que yo misma escribi.
Llego la hora de la verdad, a mi me tocó hablar justo despues de hombres que dieron su testimonio sobre el volcan,tres hombres que vivieron el horror de semejante fiera.
Apenas pude contener las lagrims escuchando eso; fue justo cuando me toco a mi salir, con la voz algo quebrada explique en mi portuñol que aun estaba emocionada con los testimonios y que me disculparan por mi portugues. La cosa no salio mal del todo, el pulso me tembabla, la voz por envidia al pulso no era de los mas serena; a pesar de todo recibi un aplauso del excaso publico que asistió,lo cual supuso que aún me conmoviera más.
Todo habia llegado a su fin, todo lo relacionado con el trabajo ,ahora vendria el disfrutar de la belleza de las islas...(entrada anterior).
Nenhum comentário:
Postar um comentário